viernes, 1 de julio de 2011

Vomito verbal…

Sentimientos que se me escapan de los poros, sentir hoy en día es casi hasta una prueba psicológica, donde, como, todos son factores importantísimos, te podes embelezar o morir en el intento de sentir, podes congelarte y desaparecer, podes volar alto y soñar eternamente, pero últimamente me caigo… no sientas nada, volvete mártir, volvete nada, volvete un suspiro que pasa pero no sientas nada, te duele en la piel y en los huesos, el corazón roto no se recompone y el inconciente registra todo, no se olvida de nada, es la herida que sangra eterna, es el deseo enorme de no caer en la tentación de sentir, no sientas, no sientas, corré, volá, reí, pero no sientas, esto te marca la piel, te marca el alma, te quema por dentro y te tira en la cama, el espacio vacío que se llene de tus brazos, que nadie quepa, que nadie entre, porque sentir duele, frágil, pesada, o a veces tan volátil como el papel, te podes caer y destruir contra el suelo como  un piano en el cemento, o podes caer y talvez lastimarte tan solo un poco el rostro como para levantarte y volver a intentarlo, no sientas!, no te quemes, arde fuerte, muy fuerte y los días se hacen melaza cuando todo quema, cuando hay que recomponerse, reconstruirse el alma cuesta mas que un espejo roto, las piezas son indescifrables de conectar, se convierte en una nada que se mezcla en el suelo y ya no sabemos donde iba cada parte de nuestro ser, nos cubrimos la cara, no miramos a los ojos, no los mires a los ojos! No te dejes sentir, la tentación es fuerte, la pulsión enorme pero no!, no sientas,  no te dejes sentir, convidate con vacíos y espacios, la ilusión es casi imposible de destruir cuando el placer vuela en el aire, pero una vez desecha es imposible de renovar, uno va muriendo lentamente con sus ideales, con sus formas, uno va desapareciendo de si y cada vez se queda con mas nada, con menos dudas porque ya casi no hay mucho porque creer, ya casi no hay mucho, ya casi no hay nada, no sientas, no te dejes volar porque la caída pesa, quiebra, rompe y ya casi no nos podemos ni juntar, tomar las piezas de uno mismo y volver a caminar es un trabajo prácticamente imposible, no nos arriesguemos a morir en el suelo una vez mas consumiendo el aire y a la vez intoxicándolo, no lo hagamos, no sintamos… no nos dejemos volar…



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